Es tradicional aquí el “llamado de las vacas”, que
consiste en llamar a las vacas por sus nombres para ordeñarlas, esto se
produce por la mañana y a las cuatro de la tarde. La persona encargada va
llamando a las vacas una por una, están sorprendentemente adiestradas que
cada una ingresa a su respectivo establo en el cual está escrito su nombre.
Otro atractivo es la iglesia de barro, construida en honor a la virgen del Carmen. Su altura es de 26 metros, esto le valió un Record Guinnes, de “el edificio de barro más alto del mundo”.
La Plaza de Armas de Cajamarca tiene una altitud de 2,750
metros sobre el nivel del mar.
Es de forma cuadrada y esta
al norte de la colina Santa Polonia.
Su área total es de 21,373
m2.
La plaza de Armas limita con
los Jirones: El comercio y Dos de Mayo.
Foto Panoramica de la Plaza de Armas de Cajamarca
Historia de la Plaza de Armas.
Se le denomina Plaza Mayor
en el año 1699 siendo corregidor de Cajamarca Juan Antonio Arostegui.
En ese mismo año se
comienzan a hacer desfiles, concentraciones cívicos patrióticos y paradas
militares.
Esta Plaza en esos años
también sirvió para tardes taurinas, peleas de gallos y a fines del siglo
pasado sirvió de mercado.
En el año 1932 la Plaza
Mayor de Cajamarca sufre una remodelación, se le coloca faroles de kerosene,
bancas y se le cambia de nombre.
El prefecto Octavio Alva y
el alcalde Alejandro Castro le ponen el nombre de Plaza de la Concordia,
nombre que no dura mucho tiempo.
En 1945 el alcalde el Señor
Carlos Malpica Rivarola remodela la Plaza de Armas de Cajamarca sembrando los
cipreses que hoy disfrutamos y coloca pisos de granito y cemento.
Lo único que se conserva de
la antigua Plaza mayor es la pileta.
El lugar donde está la
pileta es el lugar en donde los españoles amarraron fuertemente con cuerdas
al Inca Atahualpa en el año 1532.
Se
ubica a 11 km. Al sur de Cajamarca. Fue antiguamente una hacienda ganadera
hasta los años 70, cuando el gobierno militar dio una ley de Reforma Agraria,
expropiando de esta manera esta propiedad que paso a manos de sus trabajadores.
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LA COLP
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